"Podemos jugar al fútbol, pero que nunca se nos olvide el hecho de que somos mujeres". Esta podría ser fácilmente la frase bandera para cualquier jugadora que busque hacer carrera en el balompié femenino, que se ha ido desarrollando en medio de prejuicios y batallas por la igualdad.
Este "lema" es sencillamente el pensamiento de Emily Arosemena, una joven atleta panameña, de 19 años, apasionada por el fútbol, a quien practicar este deporte no la aparta de "siempre estar lo más femenina posible".
"Es mi esencia, soy mujer, me gusta", manifestó la mediocampista, durante una entrevista con día a día.
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"A mí se me da muy bien eso", asegura Emily, al referirse a que ella es fiel ejemplo de que las mujeres pueden combinar perfectamente su lado femenino con el fútbol.
"No es egocentrismo, y simplemente con ver uno se da cuenta... siempre trato de ser lo más femenina posible", agrega Arosemena.
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"Una no debe perder su esencia, su feminidad... podemos jugar al fútbol, pero que nunca se nos olvide el hecho de que somos mujeres", insiste la zurda.
Emily puede hablar con autoridad sobre el tema. En algún momento de su vida probó tibiamente el mundo del modelaje, el cual, sin dudarlo, dejó al lado para dedicarse por completo al balompié.
Otros mundos
"Hubo un tiempo en el que paré con el fútbol... estaba en otras cosas... uno cuando niño quiere hacer tantas cosas, en mi caso modelaje, practicar artes marciales... cuando uno es más chico quiere hacer de todo", apuntó.
"Participé en un certamen de modelaje en 2018... de ahí dije que no podía hacer las dos cosas a la vez... me restaba tiempo... el tiempo que estuve en el modelaje, no lo sabe casi nadie, es algo que me reservo", ex plicó Emily, quien afirma que no le molesta en lo absoluto recibir piropos.
"No me incomoda en lo personal. Hoy en día solo me dicen la chica del Sporting", comenta.
La historia entre Arosemena y el fútbol comenzó desde muy temprano en su vida.
Inicios
"Cuando era pequeña, como a los 8 años, jugaba con los muchachos, me gustaba ser portera, me iba muy bien, pero como yo era tan veloz, esa posición no era tan factible para mí, entonces incursioné de volante", contó.
"Era tan rápida que me gustó jugar como volante izquierda... empecé jugando con el Plaza Amador... ahora estoy con Sporting y aquí estoy muy feliz", señaló la canalera, quien expresa que siempre ha recibido el apoyo de su madre.
"Mi mamá nunca me puso peros, aunque generalmente son las madres las que ponen el 'stop'... tengo dos hermanos, así que es normal que me gustara el fútbol", dijo.
"Lo tomo en serio (el fútbol), de la mano con los estudios (Comunicación Social). Mi mamá está contenta y feliz", resalta.
Sueños
En cuanto a sus sueños, llegar a la selección es su gran anhelo para ella.
"Toda jugadora sueña con llegar a la selección", comenta.
"Tuve un proceso sub-17, no lo hice tan mal, tenía 15 años... lo disfruté, lo aproveché, no me arrepiento de nada... si se da la oportunidad de llegar a la selección mayor, Dios mediante, aprovecharía la oportunidad", abunda.
Curioso
En su cuenta de Instagram, Emily, para quienes no la conocen, revela cuál es su apodo.
"(Risas) Es una historia larga de contar", dice la volante, a la que conocen como 'danger' peligro.
"Es un apodo que me pusieron hace más de 3 años, no me molesta... dicen que soy muy peligrosa, son muy constante con la marca", argumenta.
Sin complejos
Por otro lado, Arosemena deja en claro que, bajo su punto de vista, hay mujeres que tienen igual o mayor capacidad para jugar fútbol que algunos hombres.
"Hoy en día, pocas personas creen que las mujeres no pueden jugar fútbol. Hay mujeres que son mejores que los hombres, más capaces", asegura.
En cuanto a los futbolistas que admira, Arosemena lo tiene claro: Antoine Griezmann. Eso sí, con un matiz incluido.
"Me gusta Griezmann, el de Francia, no el del Barcelona", finalizó.
19
años de edad tiene Emily Arosemena.
8
años tenía cuando empezó a jugar fútbol.
Mi mamá nunca me puso peros, aunque generalmente son las madres las que ponen el 'stop'... tengo dos hermanos, así que es normal que me gustara el fútbol... Lo tomo en serio el fútbol, de la mano con los estudios Comunicación Social. Mi mamá está contenta y feliz.